Es un proceso que te ayuda a ganar clientes fieles y se basa en 4 acciones primordiales que son atraer, convertir, cerrar y deleitar a las personas, y esto es a través de una variedad de canales y herramientas digitales.
La metodología inbound facilita el viaje del comprador a través de todo el túnel de ventas, convirtiéndolo de extraño a evangelizador de tu marca.